Trabajar desde la casa suena muy tentador, podría decirse que es el sueño que comparten muchísimas personas, pero ¿qué tan rentable es?
No todo es lo que parece. En las películas parece muy sencillo, te independizas, comienzas a trabajar desde tu hogar en pijama, con un mínimo de inversión y voila, tienes el éxito garantizado.
La realidad es muy diferente, como todo en esta vida ya sea que trabajes en una oficina o desde tu casa la clave es: trabajo duro, trabajo duro y más trabajo duro, pero inclusive podría decirse que el trabajo de un freelance es mucho más complejo y a veces puede tornarse algo desalentador.
La diferencia principal radica en que el que trabaja fijo para una empresa, tiene la certeza de que en sus 15 y último va a tener su sueldo, en cambio el trabajador freelance, primero tiene que realizar un trabajo titánico para hacerse una reputación dentro del área en la cual busca desarrollarse y después luchar continuamente para la asignación de proyectos.
Ser un freelance exitoso es difícil pero tampoco es imposible
Ahora bien, creo que ya quedó bien claro que ser un freelance exitoso no es soplar y hacer botellas, pero tampoco es misión imposible, hay muchas personas que son testimonio vivo del éxito, demostrando que con mucha paciencia y perseverancia se pueden alcanzar las metas que nos proponemos y hacer de nuestro trabajo una pasión rentable.
Requisitos para ser un freelance exitoso
- Paciencia: esta debe ser tu palabra clave y es que como dijimos anteriormente, ser un trabajador independiente puede resultar al principio un poco desalentador.
- Investigar: lee, busca, investiga. A través de internet hay muchísima información valiosa que nos puede ser de gran ayuda para ser mejores profesionales. Además de ello, hoy en día existen portales web que se encargan de ser el nexo entre el trabajador freelance y las empresas, facilitándote en cierta medida el trabajo, eso sí, antes de ingresar a cualquiera de esas páginas web busca información sobre las mismas para saber que tan confiables pueden ser.
- Competitividad: este es uno de los puntos más importantes. ¿Quieres conseguir clientes? Debes ser competitivo, así de simple. Si estás iniciándote en el mundo de los freelance es recomendable que el precio por tu trabajo sea más bajo que el del promedio, es la mejor manera de conseguir clientes y poco a poco ir engrosando tu curriculum, lo cual a su vez te va a permitir aumentar tus precios.
Conseguir y fidelizar clientes
Ya tengo experiencia,
¿cómo hago para continuar consiguiendo proyectos? Si ya tienes experiencia y has conseguido buenos clientes, debes mantenerte más o menos en el promedio de lo que la mayoría de los freelances están cobrando. Recuerda que los clientes recurren a un trabajador independiente porque les resulta económicamente más rentable que contratar a alguien formalmente. ¿Por qué? Porque a un trabajador fijo hay que pagarle una cantidad de beneficios extras que por Ley le corresponden, como por ejemplo, bonos de alimentación, bonos de traslado, seguros y un largo etcétera. Esto no quiere decir que regales tu trabajo, pero sí debes pensar siempre en torno a la competitividad para que nunca te falten proyectos.
Confiabilidad: si conseguiste un cliente no puedes quedarle mal, trabaja duro y realiza tu trabajo con mucha pasión. Es fundamental que cumplas con los tiempos de entrega, por lo cual debes tener siempre en cuenta no tomar más proyectos de los que estás en capacidad de hacer.
También es importante que estés en
constante contacto con tu cliente y que preguntes o aclares cualquier duda que te pueda surgir. Recuerda que un cliente satisfecho es un cliente que probablemente te vuelva a contratar para proyectos futuros y que además puede darte su recomendación facilitándote conseguir nuevos proyectos. La excelencia debe ser lo que te defina en todo momento.
Los beneficios de la vida freelance
Cuando comiences a conseguir clientes no podrás parar, sin duda alguna quedarás atrapado por los maravillosos beneficios que tiene trabajar desde casa: libertad de horario (Ojo: los freelances pueden trabajar hasta más horas que un trabajador convencional de una empresa, pero el horario lo defines tú); no debes ir de corbata o con tacones a la oficina, sencillamente
puedes trabajar en pijama si así lo deseas; poder compartir más con la familia y muchos otros beneficios que vas a ir descubriendo poco a poco.
En definitiva, ser freelance es un camino largo y difícil de seguir, pero si has decidido dar este paso en tu carrera profesional no te desanimes, con mucha paciencia, perseverancia y en definitiva
con muchísima pasión por tu trabajo podrás ver y disfrutar de los resultados más temprano que tarde.
“Todos nuestros sueños pueden convertirse en realidad si tenemos el coraje de perseguirlos” Walt Disney
